Reflexión

Lo que piensas y sientes acerca de ti mismo es aprendido y almacenado en forma de teorías llamadas auto-esquemas. Hay auto-esquemas positivos y negativos. Los primeros te llevarán a estimarte, los segundos a odiarte. Nadie contempla y cuida a una persona que odia. De manera similar, si la visión que tienes de ti es negativa, no te expresarás  afecto. Pues no creerás merecerlo. Si tu autoesquema es positivo y  no lo alimentas, se desvanecerá. Algunas personas, en lugar de felicitarse, disimulan su alegría con un parco y flemático: No es nada” o “era mi deber”. La negación del reconocimiento personal es una forma de autodestrucción”. 
                                                             Walter Risso